DIARIO DE UN MAESTRO: El cuaderno de inquietudes

DIARIO DE UN MAESTRO: El cuaderno de inquietudes

Madrid, Agosto de 2019.

El calor aplastante me ha dejado bailando las neuronas y, un verano más, me encuentro profundizando en temas en los que durante el curso no he podido, por falta de tiempo.

En la vorágine que conforman los meses del año escolar, estas pesquisas han ido quedando recogidas, esperando pacientemente su turno, en mi nueva técnica docente (plagiada de mi amiga y gran compañera Bárbara): El Cuaderno de las Inquietudes.

Entiendo vuestras caras…… ….pero, tranquilidad, que todo tiene una explicación.

Esta técnica, así en mayúsculas porque lo merece, consiste en recoger (en mi caso acumular), todas aquellas ideas que me van viniendo a la cabeza, que voy escuchando o leyendo y que considero susceptibles de adaptar para mi labor docente.

Para desarrollarla solo se necesita un cuaderno de dimensiones acordes a tu curiosidad y un buen kit de papelería (fundamental para adornar todo lo que vas escribiendo mientras pasas el tiempo viendo cómo no te da la vida para llevarlo a cabo).

Muy al contrario de lo que puede parecer, un maestro o maestra no desconecta del todo durante estos calurosos meses. Los hay que se van de vacaciones a destinos inaccesibles, están los que leen catorce novelas e incluso aquellos que emigran al abrazo de sus familias pero, en el fondo, algo nos nace cada vez que pensamos en lo que nos deparará Septiembre.

En mi caso, que soy maestra de Pedagogía Terapéutica, siempre estoy buscando el mejor camino en el que poder encontrarme con mis alumnos y éste, pasa por buscar la manera que más se ajuste a sus necesidades educativas, lo que supone un delicioso reto diario.

Durante todo este año ha estado ocupando el primer puesto de mi Cuaderno de las Inquietudes una herramienta de aprendizaje conocida como el mapeo mental que, en palabras de su autor, Tony Buzan, se trata de «diagramas visuales que se emplean para recoger información y que implican el funcionamiento de todo el cerebro en su conjunto (…) Una manera de generar, registrar, organizar y asociar ideas tal y como las procesa el cerebro.

Traído a mi campo, este recurso sirve para traducir información muchas veces incomprensible, cargada de matices complicados o con una extensión demasiado grande para poder gestionar, en pensamiento visual accesible al modo de aprender del alumnado con el que trabajo.

Dicho esto y como no soy capaz de quedarme planeando sobre una sola inquietud, he encontrado la manera de enlazar el mapeo mental con una de mis aficiones, los juegos de mesa.

Así que he empezado a «mapear» (término que me empuja siempre a girarme la gorra imaginaria hacia atrás y marcarme unas rimas) el extenso catálogo de la editorial Átomo con idea de desarrollar, el curso que viene, un taller para acercar este tipo de ocio a los alumnos y alumnas de mi centro de Educación Especial y que, a su vez, suponga aprender a aprender a través de un elemento lúdico.

Os dejo un aperitivo de lo que está siendo la creación del proyecto con un  mapa mental inicial que recoge en un golpe de vista los juegos con los que cuenta Átomo y que serán los que marquen la programación del taller.

¡¡Espero que sea un verano lleno de inquietudes para vosotros y vosotras!!

¡¡Un saludo jugón!!

Fdo. Amaya Gómez