Descubre el Ardillágono del juego de mesa familiar Ardillas del Bosque

Ardillas del Bosque es un simpático juego de mesa familiar creado por Paco Gomez.

Ardillas del Bosque, un juego de mesa familiar.

ARDILLAS DEL BOSQUE es un juego familiar muy divertido en el que vamos a ser ardillas que escondemos y robamos frutos, con la participación de los diferentes animales del bosque. Cada jugador tendrá un set de frutos que deberá esconder sabiamente y recordar bien donde y como ha escondido esos frutos, además de observar el comportamiento del resto de ardillas para identificar donde tienen sus frutos escondidos y no sus indeseables «caquitas».

El juego cuenta con un novedoso tablero modular, con 5 partes, las cuales se usarán en función del número de jugadores. Formando bosques de diferentes y atractivas formas. Además los módulos de tablero presenta dos caras, la cara día y la cara noche. Según si queremos jugar por el día o por la noche tendremos experiencias de juego totalmente diferentes.

Otra de las virtudes de este juego, es poder jugar a diferentes modalidades, en función de la edad de los participantes, desde modos sencillos para los más pequeños de la casa, a modalidades con más interacción para aquellos más experimentados.

El «Ardillágono» de Ardillas del Bosque

Una de las virtudes del juego de mesa familiar Ardillas del Bosque es su «ardillágono», esto es, un tablero modular que se adapta al número de jugadores. Pero ¿que hay realmente detrás del «ardillágono»?

Módulo del tablero por su lado de noche y su lado de día

La gracia es que el tablero crece según el número de jugadores. Escala hasta 5 participantes. Basta con unir tantos módulos como jugadores en la partida.

Tablero preparado para 3, 4 y 5 jugadores

¿Y cómo conseguimos que encajen? Sencillo.

Paso 1. El polígono encierra un ángulo de 120, otro de 90 y otro de 72 grados, que son 1/3, 1/4 y 1/5 de los 360 de la circunferencia. Además, los lados de estos tres ángulos son iguales. El resultado es un pentágono, que es la base de la solución.

Paso 2. Dos lados (el d y el e) los escondemos en el arco de circunferencia que definen sus tres vértices CD, DE y EA. Ahora tenemos un polígono de 4 lados. (Necesitamos que sea un número par).

Paso 3. Hacemos también curvos los lados a, b y c con un arco de circunferencia del mismo radio que el primero. Los lados serán, alternativamente, cóncavos y convexos porque cada lado deberá encajar sobre su lado contiguo. El lado convexo a, por ejemplo, encajará sobre el lado cóncavo b en la configuración para 4 jugadores.

Paso 4. Por último, redondeamos los vértices para no pincharnos.